Denuncian a la ONG del padre Ángel por el abandono de la Residencia Mensajeros de la Paz

La Asociación del Defensor del Paciente ha trasladado la denuncia contra Mensajeros de la Paz y la Fiscalía ha iniciado una investigación, por "abandono con resultado de muerte" en esta residencia de La Bañeza, donde según esta información han fallecido más de 70 ancianos según datos confirmados por la Junta de Castilla y León con fecha 21 de abril.

Así lo publica el medio digital Libertaddigital.com, quienes se han puesto en contacto con el letrado, Ricardo Alonso Fernández, parte de la defensa de los sanitarios que han interpuesto esta denuncia. El letrado afirma que "podían haberse evitado de no haberse realizado dejación de funciones, abandono de los empleados y negación del material sanitario cuando se tenía".

Una denuncia que recoge, según este medio digital,  un "delito contra la salud de trabajadores y residentes con resultado de muerte y daños; que sumado a la falta de información del estado de salud de los ancianos a sus familiares desembocaría en "una negación del deber de socorro", para que los familiares pudieran decidir si sacar a los ancianos de las residencias o permitir que permanezcan en ellas, tal como recoge el Defensor del Paciente.

Esta denuncia ha llegado a la Fiscalía de León, desde donde se está comenzando una investigación por supuestas irregularidades en la residencia. El abogado, Ricardo Alonso, avisa que el máximo responsable sería el propio padre Ángel, a quien desde la defensa quieren pedir responsabilidades penales, laborales y civiles.

Libertad Digital ha contactado con una de las sanitarias denunciantes que prefiere mantener el anonimato por miedo a represalias en su puesto de trabajo. La empleada desvela que Mensajeros de la Paz no compró nunca material sanitario. "Estuvimos trabajando sin mascarillas, sin EPI, sin nada. Nos expusimos y expusimos a los ancianos al contagio. Cuando fui a dirección a pedir mascarillas, la directora me dijo que no fuera de víctima y que había mucha picaresca con los equipos. Ella sí tenía su EPI y estaba encerrada en su despacho, mientras que nosotros no. El único material que nos llegó fue de donaciones y la gente de León que nos hizo mascarillas de tela", afirma la afectada.

El jurista de la defensa escribe en la denuncia que la dirección en Madrid era consciente de la gravedad y riesgo para trabajadores y residentes. "Pero en la Bañeza piden silencio. La directora pregona que son muertes naturales dentro de lo normal y fuerza a mantener a los trabajadores callados. El 25 de marzo, a la vista del escándalo, porque lo contamos a un medio local, el padre Ángel advierte del riesgo y responsabilidades que incurren y pide ayuda pública, después de ocultar la situación casi dos semanas y ser responsable directo de haber enviado a un residente enfermo (caso cero) desde Madrid. Consigue con su influencia en prensa que se rebaje el impacto y, en un par de días, se deja de hablar del asunto. Pero lo que está claro es que los fallecidos aumentaban y, a fecha de 8 de abril, había ya 66 ancianos muertos. Las trabajadoras seguían sin recibir ningún material sanitario de Mensajeros de la Paz. Y continúan sin tenerlo. El 21 de abril hay ya 72 fallecidos y los familiares están muy nerviosos. De hecho muchos de ellos se van a querellar ".

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