Homenaje en Castrocalbón: León agradece a la UME su heroica labor ante los incendios del "fatídico" verano

La Diputación de León ha rendido un solemne homenaje este jueves en Castrocalbón a la Unidad Militar de Emergencias (UME), reconociendo su intervención crucial durante los devastadores incendios forestales de agosto de 2025. El acto, presidido por Gerardo Álvarez Courel, coincidió además con el 20º aniversario de la creación de este cuerpo de élite.

Un Reconocimiento a la "Entrega Absoluta" en el Epicentro del Desastre

El presidente Courel destacó la valentía de los efectivos que trabajaron día y noche en condiciones extremas para salvaguardar vidas y patrimonio. Durante el homenaje se recordaron las escalofriantes cifras de la catástrofe:

• Superficie calcinada: Más de 100.000 hectáreas.

• Alcance geográfico: 50 municipios afectados en toda la provincia.

• Impacto humano: Cerca de 10.000 personas evacuadas.

Distinciones y Memoria Colectiva

El acto incluyó la entrega de una placa conmemorativa al BIEM V (con sede en San Andrés del Rabanedo) y la distinción "Guerrero Protector" al general de brigada Fernando Martín Pascual.

Uno de los momentos más emotivos fue el recuerdo a quienes perdieron la vida luchando contra el fuego: los voluntarios Abel Ramos y Jaime Aparicio, y el brigadista Nacho Rumbao. El homenaje contó con la presencia de Joaquín Ramos (padre de Abel) y Antonio Martínez, herido en las labores de extinción.

El Compromiso de las Instituciones

La Secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, subrayó el valor que la sociedad otorga a las Fuerzas Armadas en su apoyo a la población civil. Por su parte, el general Martín Pascual reveló que este verano la UME enfrentó un nivel de exigencia inédito, viéndose obligada a dividir equipos entre diferentes incendios por primera vez en su historia para cubrir la emergencia nacional.

El alcalde de Castrocalbón, Luis Antonio Cenador, cerró el acto expresando el orgullo del municipio por acoger este tributo a una institución que personifica la solidaridad en los momentos más oscuros.