La proxeneta más buscada de Europa controlaba un piso de explotación sexual en La Bañeza

Una colombiana con acento gallego, la cual lideraba una banda que introducía en España a menores de edad para prostituirlas además de traficar con cocina y viagras, así como dedicarse al blanqueo de dinero, se ha convertido en una de las delincuentes más buscadas por la Policía Española y Europol.

Según la información facilitada por la Europol esta fugitiva, llamada Viviana Andrea Vallejo Gutierrez alias "Vivi", ofreció a las víctimas, todas ellas menores, traerlas a España a cambio de 1500 euros, cantidad que tendrían que devolver ejerciendo la prostitución en un piso regentado por ella. Viviana no precisó las condiciones bajo las cuales realizaría esta actividad.

Para el viaje a España, Viviana les dijo a las víctimas que contactaran a un hombre en la ciudad de Pereira (Colombia) quien les proporcionaría billetes de avión, reservas de hotel y documentación fraudulenta para fingir que el motivo del viaje a España también era por trabajo. Como para probar los medios económicos en el control fronterizo. Otro colombiano, que trabajaba para Viviana, esperaba a las víctimas en el aparcamiento de Barajas (Madrid) para llevarlas al piso situado en unos bajos abandonados en Elche, haciéndolas rotar por otras ubicaciones como en Mieres y Langreo, en Asturias, y en La Bañeza, donde tenía pisos los cuales regentaba Viviana, donde iban a ejercer la prostitución.

Viviana retiraba los 1000 euros entregados a las víctimas para cruzar la frontera y les informaba que su deuda ascendía a 3000 euros porque los billetes de avión eran más caros. Las condiciones en las que las víctimas debían ejercer la prostitución eran muy abusivas, debiendo estar disponibles las 24 horas del día, los 7 días de la semana, sin derecho a descanso alguno. Solo podían salir del piso una hora al día para hacer trámites personales, pero si un cliente la llamaba, tenía que volver al piso. Compartían habitación con otras mujeres (también en situación irregular en España) donde realizaban servicios sexuales.

Viviana estaba a cargo de las actividades de prostitución, pero también proporcionaba cocaína y viagra en el piso para vender entre los clientes.

Teniendo en cuenta todos los delitos que presuntamente ha cometido, la fugitiva podría enfrentarse a más de 30 años de prisión.

Viviana es una de las fugitivas más buscadas por Europol y Policía Nacional de España, su complexión es delgada y mide en torno 150 cm, ojos azules y obsesionada con el cuidado de manos, tiene un lunar entre la nariz y el labio en la parte izquierda del rostro, colombiana de nacimiento, pero con nacionalidad española, la describen como fría, calculadora y sin rasgo alguno de empatía, oculta su deje caribeño con “un marcado acento gallego”.