
El sábado 17, un emocionante intercambio musical tuvo lugar entre La Bañeza y Cervera de Pisuerga, dos localidades unidas por la pasión por el folclore y, en particular, por la pandereta. Un grupo de entusiastas aficionados al folclore de La Bañeza se trasladó a Cervera de Pisuerga invitado por el Grupo Tradicional Alto Pisuerga para disfrutar de una jornada de intercambio musical.
La expedición bañezana estaba compuesta por varias personas que han estado aprendiendo a tocar la pandereta tradicional leonesa bajo la tutela de Francis Santos. Como actividad de fin de curso, se decidió organizar este intercambio con el objetivo de mostrar sus avances, difundir la cultura tradicional leonesa y explorar la riqueza cultural de otras regiones. Además, el encuentro sirvió para fortalecer los lazos de amistad entre los grupos.
A su llegada a Cervera, el director del Grupo Alto Pisuerga, Juan Carlos Otero, dio la bienvenida a los visitantes y los acompañó durante la mañana para explorar la hermosa localidad montañesa. Tuvieron la oportunidad de recorrer las calles y visitar la Casa del Parque Natural Fuentes Carrionas.
Por la tarde, en el Salón de Actos Fundos, tuvo lugar una actuación conjunta de ambos grupos. Ataviados con trajes tradicionales leoneses, los bañezanos interpretaron varios temas populares de la provincia, acompañados de sus panderetas. Dado que algunos de los estudiantes de pandereta también forman parte del Grupo de Bailes La Asunción, el espectáculo culminó con dos canciones acompañadas de bailes, siendo la última de ellas la famosa Jota de La Bañeza. Los anfitriones también ofrecieron un magnífico repertorio de pandereta y baile.
Durante el evento, el alcalde de Cervera estuvo presente en el salón y entregó a los visitantes una bolsa con productos típicos de la zona. A su vez, los bañezanos obsequiaron a los anfitriones con un recuerdo proporcionado por el ayuntamiento de La Bañeza.
La actuación conjunta finalizó con un cálido aplauso por parte del público asistente. Ambos grupos se despidieron con el compromiso de completar el intercambio con una visita de los cerveranos a La Bañeza. Para cerrar la jornada de convivencia en un ambiente de fraternidad, todos compartieron un pincho ofrecido por los anfitriones, disfrutando de canciones y bailes.
Este intercambio musical dejó un gran recuerdo entre los participantes y fortaleció los lazos culturales entre La Bañeza y Cervera de Pisuerga. La música y la amistad trascendieron las fronteras geográficas, demostrando una vez más el poder unificador de la cultura tradicional.
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