Estela Santos toma el testigo como Musa 2025 del Carnaval de La Bañeza

La presentación de la musa 2025 ha marcado otro paso más hacia el carnaval de La Bañeza. Durante el acto de esta tarde, el alcalde Javier Carrera abrió la ceremonia agradeciendo al grupo Salsa, responsable de iniciar esta tradición hace años y que, con el tiempo, se ha convertido en una pieza fundamental del imaginario carnavalero.

Un inicio con reconocimiento a la tradición

El alcalde, escoltado por las musas entrante y saliente –la cara visible del carnaval–, subrayó el valor histórico de la tradición instaurada por el grupo Salsa. En palabras del grupo "la charra", "esta ciudad me mata cada día y me resucita por carnaval", reflejando el compromiso de preservar los valores y la identidad que han caracterizado a la festividad durante décadas.

Palabras de compromiso y continuidad

Posteriormente, la concejala de fiestas, Carmen Macho, tomó la palabra reiterando el mensaje del alcalde y resaltando la importancia de mantener vivas las raíces del carnaval. La emotividad del acto se intensificó cuando Marta, la musa saliente, expresó su sincero agradecimiento a todos aquellos que la apoyaron durante el pasado carnaval. Con una mezcla de alegría y melancolía, Marta animó a la nueva musa a continuar la tradición y, en un emotivo relevo, entregó el simbolismo de la responsabilidad a Estela a la que advertía de que disfrutara cada segundo de este su carnaval el cual pasará tan rápido que cuando termine a poco le iba a saber.

Una nueva musa en el Olimpo carnavalero

Estela, quien compartió parte de su infancia con Marta y siguen siendo amigas, estudia en Salamanca y pertenece al grupo Legolas. Subrayó en su intervención la relevancia de que la experiencia carnavalera se transmita de generación en generación. Su intervención fue un llamado a todas las bañezanas para que vivan intensamente cada instante de esta fiesta que, más que un evento, es un auténtico estilo de vida en La Bañeza.

Con este acto, la presentación de la musa 2025 no solo reafirma el compromiso con esta tradición, sino que también rinde homenaje a aquellas mujeres –madres, abuelas y costureras– que, desde el trasfondo, han forjado el espíritu y la identidad del carnaval bañezano.