La Bañeza despide a Melchor del Río Salvador, "Chorín", pionero del Vespino en la Ciudad

La Bañeza dice adiós a Melchor del Río Salvador, conocido por todos como "Chorín", quien falleció el 15 de junio de 2025 a los 88 años de edad. Su velatorio se lleva a cabo en el Tanatorio La Cruz (sala 3), y sus restos serán despedidos este lunes 16 de junio con un funeral a las 19:00 horas en la Iglesia Parroquial de El Salvador, seguido del entierro.

 

Un Referente de la Mecánica y la Pasión por el Vespino

Melchor del Río Salvador fue una figura emblemática en La Bañeza, reconocido por su destreza en la mecánica y por ser una piedra angular en la afición local por las motocicletas, especialmente las Vespinos. Nacido en 1937, "Chorín" mostró desde niño una precoz vocación por los motores, iniciándose en el mundo de las reparaciones a los ocho años en el Garaje España. Su formación lo llevó a adquirir conocimientos en Castro Motor de León y, de manera crucial, a perfeccionar sus habilidades en Gijón.

Fue un auténtico autodidacta, aprendiendo a través de la práctica constante y la experimentación. Su taller, ubicado frente a la actual oficina de Correos, comenzó como un punto de referencia para la reparación de bicicletas, evolucionando con el tiempo hacia el epicentro de la fiebre del ciclomotor en La Bañeza. Su relación con la marca Vespa fue fundamental; se estima que entregó más de 4.500 Vespinos en la comarca, contribuyendo decisivamente a popularizar este icónico vehículo. Su dedicación era tal que realizaba reparaciones a deshoras, a menudo trabajando hasta la madrugada para mantener a sus clientes en movimiento.

El Legado de Chorín: Impulsor de la Cultura Vespino en La Bañeza

La pasión de "Chorín" por las dos ruedas trascendió su faceta profesional. Fue un motor clave en la creación y consolidación de la afición al motociclismo en La Bañeza. Su contribución fue tan significativa que este año, la ciudad acogerá la Reunión Nacional de Vespinos, un evento que no hubiera sido posible sin la base que él sentó. La existencia de una arraigada cultura Vespino en la ciudad, con concentraciones locales que se han celebrado durante años, es un claro testimonio de su influencia.

Su hijo, Federico del Río, quien preside el Club de Vespinos de La Bañeza 303, continúa con el legado familiar, manteniendo viva la pasión por estas motocicletas que su padre tanto amó. "Chorín" no solo fue un mecánico; fue un formador, un innovador y, sobre todo, un entusiasta que contagió su amor por las dos ruedas a generaciones de bañezanos. Su partida deja un profundo vacío, pero su espíritu y su contribución a la cultura motera de La Bañeza perdurarán en el tiempo.