
La Junta de Castilla y León ha garantizado hoy que realizará un seguimiento exhaustivo de los compromisos adquiridos por Azucarera con los cultivadores de remolacha, asegurando que no sufrirán cambios ni se les repercutirán los costes de transporte. Así lo ha trasladado la consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, María González Corral, durante una reunión extraordinaria del Consejo Agrario de Castilla y León, convocada para abordar el plan de reestructuración de la compañía.
González Corral informó a las Organizaciones Profesionales Agrarias (OPAs) sobre las diversas gestiones realizadas por el Ejecutivo autonómico, incluyendo las reuniones encabezadas por el presidente Alfonso Fernández Mañueco con los representantes de los trabajadores y la propia empresa.
La consejera enfatizó la necesidad de exigir a Azucarera una "mejora de su política" hacia el sector remolachero-azucarero. Aunque la empresa ha asegurado que los agricultores no experimentarán cambios y que asumirá los costes logísticos del traslado de la remolacha a la fábrica de Toro, González Corral fue contundente: "Vamos a estar pendientes de los hechos y no de las palabras".
Además, la consejera subrayó la importancia de que el sector de Castilla y León alcance "mayores cuotas de autonomía" en el mercado del azúcar, lo que implica focalizar el esfuerzo en el cultivo de la remolacha. Las organizaciones agrarias, por su parte, expresaron su preocupación por el futuro de las próximas campañas, una inquietud que la consejera se ha comprometido a trasladar directamente a Azucarera.
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