El Grupo de Bailes La Asunción celebra 34 años de historia y más de una década de su "renacimeinto"

El tiempo, ese narrador implacable, se detiene por un instante en La Bañeza hoy 12 de septiembre, para rendir tributo a la memoria de la tierra. Hoy, un latido más se suma a su historia, el del Grupo de Bailes La Asunción, que conmemora 34 años de existencia y el undécimo aniversario de su resurgimiento. Más que una fecha en el calendario, es la reafirmación de unas raíces que nunca se cortaron.

Fundado en 1991, este colectivo de mujeres se alzó como el custodio de un tesoro inmaterial: las danzas, los cantos y los atuendos que narran la historia de la comarca bañezana. Fue un acto de devoción, un hilo que tejieron para unir el pasado y el futuro. Tras un período de silencio, como la tierra que reposa en invierno, la tradición resucitó en 2014. Una nueva generación, con la misma convicción que las fundadoras, tomó el testigo y dio un nuevo aliento a una herencia que se negaba a ser olvidada.

Guardianes del legado y hacedores del presente

Desde su regreso a la vida cultural, el grupo se ha erigido en un pilar fundamental de la comunidad. Sus miembros caminan con un propósito claro: "No dejar perder en el olvido nuestras vestimentas, canciones y bailes regionales". Con cada paso, con cada nota de las dulzainas de "Bañezaina", tejen el presente con los hilos del pasado, honrando a sus antepasados.

Su labor no se limita a estar presente en los actos culturales con arraigo tradicional danzando bajo pendones o en un escenario. Sus bailes han resonado en la Ronda Tradicional Bañezana, una iniciativa propia que ya celebra su segunda edición, o su solidaridad ha sido el calor de hoguera en el Magosto Solidario. Son puentes entre pueblos, como demostró su reciente intercambio cultural en tierras gallegas de Pontevedra.

A través de este aniversario, el Grupo La Asunción mira atrás con profunda gratitud hacia las fundadoras y a todos los que han formado parte de esta gran familia. Cada paso que dan es un eco de la historia, un juramento de fidelidad a su identidad.

Hoy, en La Bañeza, la herencia cultural tiene un nombre y un rostro. Y en cada baile, el Grupo de Bailes La Asunción reafirma su compromiso inquebrantable de ser los guardianes de unas raíces que, por su empeño y pasión, seguirán dando frutos.